“Su llanto era el de una mujer desesperada, a quien no le interesaba llorar aquí, en la calle o en su pieza en forma privada”.

Lamento que las cosas hayan sucedido de esta forma, siempre disfrazamos emociones pero nunca se distingue lo que se asoma detrás de ellas.

No me preguntes por qué, simplemente dame una razón de estar así.

Cambio de vida, cambio de hábitos, de qué sirve si todo está lejos. Cambio de vida, cambio de razonamientos, de qué sirve si todo al final se lo lleva el viento.

La piedra se aleja de su anillo, simplemente porque el anillo ya no cumple con las expectativas de su belleza. La piedra siente que en anillo ya no la llena y que si no pudo, ya jamás alguien podrá hacerlo, como no hubo alguien jamás que lo hizo.

Dolor y lágrimas se encierran en un lugar que late a fondo a punto de reventar. Dolor y lágrimas se encierran en donde hay una herida que ni el cuento más lindo de amor sanará.

¿Simplemente te alejas sin poder evitarlo?

¿Acaso no tienes el alma fuerte para poder lograr lo que nunca pudiste por cobardía?


Mi alma es fuerte, pero mi corazón es débil, no creo que aguante para siempre. Pero su agonía será lenta, como muere un ave caída.